San Pedro de Caldas

Yanguas de Eresma y más concretamente San Pedro de Caldas tiene una fuente que tanto en invierno como en verano su agua no se agota y sale a 20ºC. Enclavada en el mismo corazón de la Ruta de los Castillos y le permite disfrutar de un entorno inolvidable y único. Castillos el Alcazar de Segovia, el de Turegano ó Coca harán la delicia de grandes y pequeños trasladándonos a momentos históricos de Segovia que han marcado muchas veces la historia de España... sin duda un destino perfecto para una agradable escapada rural en familia

San Pedro de Caldas es un gran alojamiento turístico situado en el municipio de Yanguas de Eresma y ubicada en la vieja estación de tren en el barrio de San Pedro de Caldas con un horizonte que se llena de colores con la tarde y el arco iris se diluye haciendo que el anochecer sea único, mágico, especial y muy tuyo. El alojamiento está asentado sobre la planta de una antigua fonda, que daba cobijo a todos aquellos que transitaban cerca de la estación de Yanguas de Eresma embarcando. Cuenta con 14 habitaciones con 17 baños completos dedicados a la comodidad y al bienestar de quienes las ocupan. Todas diferentes y con un único elemento común y es que el lavabo está integrado en la habitación y no en los baños que tiene cada una, algo que le da un carácter elegante. Dos habitaciones son suites, una habitación de cuádruple y el resto dobles.

En las zonas comunes varios ambientes para diferentes estilos de vida y de formas de pasar el tiempo y nuestros mejores momentos. Una sala de estar con chimenea muy acogedora con una decoración muy cuidada. Un salón en la planta superior con televisión dividida para los que gustan de la lectura y la concentración donde encontrarán una buena excusa para dejarse llevar por una buena historia en la que meterse de lleno. Un comedor tan acogedor como su cuidada decoración unida a la luz que pone de manifiesto los materiales naturales que se han utilizado dando un toque delicado. Una cocina muy preparada donde podemos cooperar todos para sacar los mejores platos de sus fogones con los mejores ingredientes de la zona. Una barbacoa construida con piedra de la zona en la que pasar junto a ella grandes momentos al calor de sus brasas regadas por unos buenos tintos ó verdejos de la zona. Y que por la noche tiene como techo y luz su imponente cielo desde donde uno puede “admirar” las estrellas.

Su cocina tradicional nos hace volver a viejos placeres que sólo el paladar particular de cada uno reconoce al degustar ese cochinillo asado al horno, el lechazo ó el cabrito de Castilla, el buey hecho a la piedra en la mesa, el jamón ibérico que destila poemas, el chorizo de Cantimpalos que nos habla de viejos chacineros que dejaron sus recetas para ser fuente de inspiración delante de la chimenea y de un buen vino de cepas de más de 100 años que convierten a la Campiña Segoviana en una isla a una hora de Madrid y de Valladolid situada a 5 minutos de la autovía que une Segovia con Valladolid.

A pocos kilómetros en las increíbles Hoces del Duratón podrá disfrutar de las excursiones únicas en canoas a lo largo del río que le llevaran a observar la maravillosa flora y fauna de los alrededores algo que merece la pena reseñar es la Reserva de Buitres Leonados que hacen la delicia de muchos en un entorno tan espectacular. Podrá respirar su aire puro ante la hermosura centenaria de la fresneda de Añe ó pasear por las calles de Carbonero el Mayor ante su imponente iglesia donde podrá contemplar las estilizadas figuras de sus numerosas cigueñas escuchando su cotorreo, conocido en el lenguaje de la tierra como el “machacar del ajo” ó la ágil figura del Milano Real. Confluyen en su término los ríos Moros y Eresma adquiriendo el paisaje características propias de la ribera. A simple vista se divisa la Tierra de Pinares, además de barranqueras, tierras de monte bajo y soto, todo ello mezclado con prados y la luz característica de Castilla que hacen de sus campos algo único.

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